La Archicofradía del Paso y la Esperanza proyecta una reforma provisional del altar de la basílica
Treinta años después de que la Archicofradía del Paso y la Esperanza contara con un templo propio, la popular hermandad del Jueves Santo parece dispuesta a acometer realmente un proyecto de reforma y mejora del altar en el que rinde culto a sus imágenes titulares. Su junta de gobierno ha dado este martes luz verde a una intervención que, con diseño del sevillano Javier Sánchez de los Reyes y ejecución del artista local Francisco Naranjo, supondrá una reducción del espacio en el que se encuentran las tallas del Nazareno del Paso y la Virgen de la Esperanza para darle un aspecto de camarín.
La actuación, cuya ejecución depende de que sea refrendada por el cabildo de hermanos de la archicofradía, consistirá en cerrar el espacio en el que se encuentran los titulares por los lados, prolongando hacia el presbiterio el arco del medio punto que forma la media cúpula que los alberga. De este modo, los conjuntos de lámparas de orfebrería que actualmente enmarcan el altar se colocarían de frente, ocupando el nuevo espacio de cerramiento lateral.
Asimismo, se adelantará el fondo del espacio en el que se encuentran las imágenes mediante paneles de pladur, para que queden más recogidas. Francisco Naranjo plasmará en esos paneles una decoración diseñada por Sánchez de los Reyes de corte neobizantino, emulando la que se instaló en la capilla de la archicofradía en la iglesia de Santo Domingo, meses antes de que fuera destruida en los sucesos de 1931. El proyecto prevé que las imágenes permanezcan situadas como en la actualidad, una junto a la otra, en sendas peanas, en un mismo nivel. No obstante, Sánchez de los Reyes ha proyectado igualmente una nueva configuración del espacio inferior en el que se encuentra el sagrario de manera que quede más integrado con la zona superior de los titulares, para que estos se vean más arropados.
En definitiva se trata de acabar con la sensación de vacío que genera desde hace décadas el altar en el que la Archicofradía del Paso y la Esperanza venera a sus imágenes. Con todo, su hermano mayor, Carlos López Armada, ha aclarado a este periódico que esta actuación «es algo provisional para sustituir los cortinajes burdeos del altar y adecentarlo». Así, ha asegurado que se no cierra la posibilidad de que, en el futuro, pueda plantearse la realización de algún tipo de retablo. En ese sentido, cabe recordar que la anterior directiva de la corporación perchelera, comandada por Manuel Harras, llegó a aprobar un proyecto de altar que contó con el visto bueno del Obispado y que proponía situar las imágenes una sobre otra (el Nazareno arriba y la Virgen abajo), en camarines separados. No obstante, López Armada incidió en que lo que se propone realizar ahora no es un retablo, sino una mejora de lo que existe que irá acompañada de la renovación de toda la pintura interior de la basílica y la instalación de un cancel interior de madera en la puerta de acceso.
Fuente: diarios.es